junio 29, 2005

21 gramos

El grito, Eduard Munch

Todavía muchos días después de ver la película seguía pensando en esos 21 gramos que el cuerpo pierde al morir... ni siquiera sabía que había un estudio científico detrás de esa idea.
Hace unos días me encontré con la nota en el periódico:
El alma existe. No en términos metafísicos, sino concreta y científicamente. Está situada en la marea de neurotransmisores y los recovecos de las estructuras cerebrales.
Esos 21 gramos que se desvanecen cuando morimos y que mantienen nuestra conciencia activa; ese espíritu apenas perceptible que, según los creyentes, va al cielo o al limbo. Esa quimera, ese suspiro... tiene explicación científica.
El investigador Francis Crick, (Premio Nóbel en 1962 por describir, junto con James Watson, la estructura tridimensional de doble hélice del ADN en 1953). Crick se dedicó a la búsqueda científica de la conciencia: Porqué existe?, Cómo funciona? y, Dónde se aloja?
La caja negra. Los sentimientos de alegría, amor, tristeza, recuerdos, el sentido de identidad y voluntad, es resultado del funcionamiento de las células nerviosas y sus moléculas asociadas.
De acuerdo a Crick, nosotros tenemos la impresión de que tomamos decisiones, positivas o negativas, pero en realidad siempre somos concientes de que tomamos una decisión y no de qué fue lo que nos hizo tomarla.
A cualquiera le da la impresión de que tomarla o dejarla es un acto libre. La conciencia es mucho más que la transmisión de información y su proceso. El secreto, afirma Crick, está en la atención.
Cuando la actividad cesa aparentemente, es decir, cuando dormimos, nuestras redes neurales y sus neurotransmisores siguen su trabajo, hasta que morimos.
Por ello, aún gemelos idénticos tienen almas diferentes, ya que siempre, en algún momento, uno mira hacia un lado y el otro, hacia el lado contrario. Es decir, construyen experiencias, memoria, e interpretaciones diferentes.
Al morir, y sólo al morir, la actividad eléctrica y química de nuestro cerebro se detiene realmente, y entonces sí, nuestra alma cesa.
Es, en palabras del propio Crick, "materia sin chispa".

junio 09, 2005

Y sus manos?

Al verlo, seguro tenía que mirar sus manos... Cuántas hojas podrías bocetear sobre un par de manos?... desafortunadamente esta vez no encontré esas grandes y cuadradas, como si las hubieran dibujado con una regla.
Definitivo, no son unas manos solventes, en las que cupiera una casa, el invierno, el agua y el aire...
y también la comprensión...

Una ranura en la conciencia...

Detesta esperar, la irrita que su ritmo interno no coincida con el del mundo... no sabe que hacer en el café no desea ser percibida como la que espera, que la olfateen como una chica y detecten ese desajuste. Prende un cigarrillo y fingiendo encontrarse allí por casualidad, decide ocuparse de otra cosa. Pide el primer café, luego saca su agenda de la cartera y mira muy concentrada alguna anotación.
Aprovecha para prepararte, le dice una voz interna, qué táctica vas a usar?... Maldita! Responde la otra voz (suele tener dos voces), por qué debo tener una táctica?, es que no puedo asistir a una simple cita sin cálculo? Respuesta: Has olvidado en que mundo vives? Ya nadie se enfrenta a nadie sin un mínimo diseño!... y qué diseño necesito? (la segunda voz es temerosa y humilde), una estrategia de poder, aunque sea simple; de eso se tratan hoy las relaciones.
La palabra táctica queda rondando en sus contradictorias percepciones... no traía ninguna y de pronto se sintió mal equipada... Chingaos! Estoy desarmada!
Cuanto es el tiempo razonable, lo decente, que una mujer espera a un hombre en un café? Nadie le enseña a una esas cosas... y a decir verdad en una cita con un tipo al que apenas y se le conoce (si es que se puede decir eso) la espera no es un problema de sentimientos sino de producción, no resiste la idea de enredarse una vez más en esos nervios anticipatorios.

junio 06, 2005

Bienvenidos!

Tengo que admitir que he dejado que me invada un tanto la tristeza... ha llegado a la vida de una pareja a la que estimo un ser pequeñito que ya con más que ansiedad esperaban... y no estuvo él para festejarlo.
Ni pex, cada vez habrá más cosas para las que ya no estará.
Pero además sucedieron cosas que me hicieron sentir un deja vu por instantes...
Saber que tendría que ir nuevamente a uno de los hospitales de esa red, no haber visto a la pequeña Vale en la visita y saber que al otro día había quedado nuevamente de ver al visitante de Guanatos... se parecía tanto a esa mala historia... que sentí miedo...
Me di cuenta de que soy más paranoica de lo que imaginé...
El encuentro con él fue grato, agradable... en mi caso, fue un paso afortunado, nuevamente desafíe lo que dicta mi ley (nunca habría aceptado salir con alguien a quien apenas conozco y por msg!).
Todo salio bien, por fin y después de tanto posponerlo fue como un alivio, como quitar un peso de más que traía de hacía mucho sobre los hombros, ya que esto ha resultado muy accidentado...
Sí, me dejo cosas buenas, la principal?: me permitio ver que efectivamente el mundo es más grande!

junio 01, 2005

Miedo...

La inseguridad que siempre he cargado a cuestas ha definido en gran medida toda mi personalidad, ese miedo que me invade constantemente ha sido el mismo que me ha impulsado al crecimiento a partir de las no pocas crisis que me ha tocado enfrentar, siempre lo he sabido e incluso he llegado a creer que esa lucha jamás la habría llevado a cabo sin las circunstancias extremas en las que he tomado decisiones definitivas para mi y los míos...
Hoy me tropecé con esta idea que no desconocía pero que no había tocado tan fuertemente como ahora:
"...el miedo es el que nos mueve a hacer o no las cosas...desatando dentro de nosotros una lucha entre ángeles y demonios. (P. Coelho)"
Realmente me quede boquiabierta, después de todo lo charlado el día de hoy...sí, ese es el miedo.
Y la evolución llega después de librar esa lucha...