De chavita me maravillaba el aroma que entraba por la ventana de mi cuarto, dulce... y me sorprendía que fuera precisamente la noche quien lo activaba, mi mamá tenía una plantita "huele de noche" en el patio de atrás de la casa y su aroma ambientaba mi recámara.
Esta semana, seguro por la noticia de su muerte al inicio del año, retome a Lhasa de Sela... hacía rato que no la escuchaba, me pone triste, pero me gusta.
Siendo sincera su música venía muy ad hoc en estos días que la tristeza se instaló, la ansiedad que me deja el convivir con ella, el miedo de pensar en la violencia, la desesperanza, la enfermedad... el futuro de nuestra sociedad con la única certeza de que será un futuro difícil y con sueños que podrían sólo quedar en eso... que miedo.
Y a pesar de todos esos nefastos pensamientos en mi mente, Lhasa me traslado al olor del huele de noche que me encanta, a la vainilla... me instaló en lo maravillada que me encuentro de pensar que "Love came here" y aunque intuyo las razones de esa pieza, la instaló en mis circunstancias y la hago mía (lo que finalmente es uno de los objetivos que tienen los creadores con sus obras).
Encuentro que con todos esos temores y tristezas, ambiento mi cuarto con el olor del huele de noche, la hermosa música de Lhasa de Sela y el amor... mi amor!
Now that my heart is open,
Lhasa de Sela, Love came here